Es más que probable que alguna vez te hayas planteado si lo que tú digas u opines importa para algo o tiene algún efecto en cómo funciona el mundo. También habrá habido ocasiones en las que hayas sentido desmotivación viendo que tus esfuerzos sirven para poco si no se da un cambio más global o si todo el mundo no empieza a remar en la misma dirección. Te entiendo, yo también me he sentido así alguna vez.
Esta frustración viene porque a veces no es difícil olvidarse de cómo cuando la tendencia popular es distinta a lo que nosotros proponemos o los ideales por los que luchamos esta sigue siendo la suma de muchas acciones individuales. Hoy vamos a hablar un poco de porque nuestra voz, nuestra acción y nuestro voto, tienen todo el peso y toda la validez que tenemos nosotros como personas.
En este artículo encontrarás:
Tu opinión es valiosa.
¿Alguna vez has dudado de la valía de tu opinión? A la mayoría de las personas nos ha pasado en alguna ocasión y esto no tiene porqué ser fruto de tener una baja autoestima o sentirse inseguro, podría serlo, pero no siempre es así. Tener dudas sobre nuestra propia opinión puede ser simplemente una señal de que sabemos ser críticos con nosotros mismos y no asumimos que una opinión es verdadera por el simple hecho de ser nuestra. Es imposible saber de todo, habrá temas en los que controlemos más y otros en los que necesitemos más aprendizaje, por eso no te preocupes si frente a ciertos temas no te sientes seguro de tus opiniones, cuando se dé ese caso, simplemente ábrete al aprendizaje y sé crítico con cualquier argumento antes de asumirlo como la verdad.
Sin embargo, hay otras ocasiones en las que aunque creamos tener una opinión bien formada acerca de un tema, nos enfrentamos a discusiones en las que nuestro interlocutor defiende sus argumentos de una forma en la que queda poco espacio para el diálogo. Aquí quiero dejar una cosa bien clara, una buena capacidad retórica no convierte los argumentos de alguien en más válidos. Créeme, estudie la licenciatura de filosofía en la que me pasé cinco años analizando las correctas e incorrectas maneras de argumentar, las contradicciones y las falacias… y tras eso estudie una asignatura anual de Retórica, el arte del discurso y de la persuasión, y puedo decirte a ciencia cierta, que NO tienen nada que ver. Sucede incluso que hay personas que no saben dialogar, que no escuchan a su interlocutor, que alzan la voz, o que cuando te escuchan solo piensan en cómo rebatirte en lugar de tratar de aprender o ser críticos para llegar a un entendimiento construido en lo que distintos puntos de vista pueden aportar.
Por todo esto te digo, tu opinión es valiosa. Lo es al igual que lo es la de cualquier otra persona, porque tú eres igual de valioso que él o ella. Si crees que tu opinión no está lo suficientemente formada en algún tema o tienes dudas, infórmate, abre las antenas, escucha, lee y sé crítico. Ahora vamos a hablar un poco más sobre esto.
Tu opinión es valiosa. Lo es al igual que lo es la de cualquier otra persona, porque tú eres igual de valioso que él o ella. Si tienes dudas, infórmate, abre las antenas, escucha, lee y sé crítico. Share on X
No te creas lo primero que oyes, aunque parezca tener sentido.
Si tienes dudas acerca de un tema, escucha y lee a personas que creas que tienen información valiosa. Pero por favor, no te creas lo primero que oigas, solo porque parezca tener sentido. Seguro que te ha sucedido alguna vez que dos amigos te han contado algún malentendido que han tenido entre ellos. Normalmente, cuando escuchamos la versión del primero que nos lo cuenta su versión parece tener sentido y no suele ser hasta que escuchamos el punto de vista de la otra parte que nos damos cuenta que las cosas no eran blancas o negras, que probablemente cada uno tenía su parte de razón o incluso al escuchar al segundo dejamos de estar de acuerdo con la primera versión de la historia que escuchamos.
Pues bien, esto sucede con casi todo en la vida. Si sientes que te falta información sobre política, por ejemplo, y escuchas a alguien hablar de sus argumentos para votar a cierto partido político, a no ser que diga algo muy extremo probablemente te parezca que tiene bastante sentido e incluso sientas la tentación de hacer tuyas sus opiniones. Esto pasa en grupos de amigos, en parejas, entre padres e hijos… Simplemente tendemos a fiarnos de la opinión de alguien que utiliza argumentos que parecen razonables. Pero como decíamos antes es importante abrirse a escuchar los puntos de vista de aquellos que piensan radicalmente opuesto ¿por qué? porque solo así seremos capaces de contrastar puntos de vista con el fin de crearnos nuestra propia opinión. Es tan útil escuchar a alguien decir porque va a votar a un partido político, como porque está en contra de otro. Y siempre siempre siempre, si algo no te convence, o no lo entiendes, pregunta.
Es importante abrirse a escuchar los puntos de vista de aquellos que piensan radicalmente opuesto ¿por qué? porque solo así seremos capaces de contrastar puntos de vista con el fin de crearnos nuestra propia opinión. Share on X
La importancia de intercambiar opiniones.
Ya hemos dejado muy clara la valía de nuestra opinión. Ahora ¿por qué es importante el intercambio de opiniones? Lo es porque solo de esta manera favoreceremos ese espacio donde se fomente el pensamiento crítico y se eliminen los dogmas o creencias arraigadas o impuestas por tradiciones que muchas veces no tienen ninguna fundamentación racional. Antes hablábamos de la importancia de informarse, pues bien, cuando debatimos (debate sano y constructivo, por favor) nos ayudamos unos a otros a desmontar argumentos poco consistentes y además, si estamos dispuestos a corregir nuestros puntos de vista enriqueciéndonos de los de los demás, probablemente lleguemos a conclusiones mucho más valiosas.
Otro motivo por el que el debate es importante es porque normalmente, alrededor de las personas que intercambian opiniones, suele haber personas menos informadas que escuchan, aprenden y se enriquecen. No olvidemos que todos los ciudadanos tienen voto y el peso de todos los votos es igual de importante, por lo que cuantas más personas se enriquezcan de estos debates constructivos, mejor funcionará la democracia.
Cuando debatimos nos ayudamos unos a otros a desmontar argumentos poco consistentes y además, si estamos dispuestos a corregir nuestros puntos de vista enriqueciéndonos de los de los demás, llegaremos a conclusiones más valiosas. Share on X
¿Realmente importa lo que yo haga si soy uno entre miles?
Esta es la pregunta del millón ¿para qué voy a votar si mi voto cuenta tan poco que no va a cambiar nada? bueno, este argumento amigo, es una gran falacia. Tu voto es uno, exactamente igual que el del resto de millones de personas que van a votar. ¿Dónde se ve la diferencia? en que hay sectores de la población entre los que la abstinencia (al voto xD) es mayor y ahí es donde se ven los resultados.
Por lo general, la gente que no vota es porque no siente una fuerte opinión hacia qué partido votar. No sienten que su opinión sea lo suficientemente fuerte o valiosa para expresarla. O cómo hablábamos en este artículo de hace unas semanas piensan «Es que a mí la política no me interesa«. Si este es tu caso, es tu responsabilidad informarte y hacer uso de tu derecho, pero también de tu deber como ciudadano. Piensa que si no decides, la vida y los demás decidirán por ti, las circunstancias y opiniones de los demás quedaran antepuestas a las tuyas, aunque tu visión de la vida o cómo la sociedad debería funcionar tenga más sentido o sea más justa. No voy a decirte aquí argumentos tales como «si no votas luego no te quejes», a mí no me importa demasiado que luego te quejes o no, pero lo que sí que me importa es que todos seamos conscientes de que sí, nuestro voto es UNO, pero también es un voto individual el de todos aquellos que votan a opciones opuestas a las nuestras. Y así se eligió a Trump en EEUU, mediante un montón de votos individuales, así que no menos precies el tuyo.
Si no decides, la vida y los demás decidirán por ti, las circunstancias y opiniones de los demás quedaran antepuestas a las tuyas, aunque tu visión tenga más sentido o sea más justa. Share on X
Mi opinión personal que obviamente puedes ignorar (aunque aún no sé qué votaré).
Piensa en todo lo que hemos luchado este año, piensa en las manifestaciones en contra de la violencia hacia las mujeres, piensa en el revuelo causado tras las elecciones andaluzas, piensa en cómo algunos partidos políticos estaban en contra de las manifestaciones del día de la mujer y por favor no me digas que no se te llena el estómago de ira y ganas de meter la puta papeleta en la urna.
Te voy a ser sincera, no veo una opción clara en estas elecciones, pero lo que sí sé seguro es que no quiero que nadie ponga en peligro los derechos que con tanta sangre, sudor y lágrimas de muchas personas tanto costó conseguir. Sé que no quiero que se eche a nadie de mi país, sé que no quiero que se deje de proteger a las mujeres que sufren maltrato en sus hogares, sé que no quiero que se trafique con la vida ni con el cuerpo de nadie llamándole a eso libre mercado o feminismo.
Creo que demasiada gente en España va a basar su voto en la problemática catalana. Y lo siento, no me parece justo. Es un asunto importante, es muy complejo y tiene una muy difícil solución, os lo garantizo, en ese asunto las cosas no son blancas o negras y ninguna de las posiciones tiene toda la razón. Precisamente por esto creo que no deberíamos dejar que nadie tratase de nublarnos el juicio en lo que refiere a todo el resto de decisiones políticas. Hay que ser menos cabezotas señores y ver un poquito más allá.
Nada más por hoy, espero que ese artículo te haya servido para llenarte de motivación e ir a votar con toda tu fuerza el próximo domingo.
Por si te apetece escuchar algo más sobre esto, aquí te dejo uno de los primeros y mejor valorados episodios mi podcast que lleva el mismo título que esta entrada.
¡Un abrazo, nos leemos!