Cómo vencer el miedo al fracaso. Las trampas del ego.
¿Cuántos proyectos nunca llegar a triunfar por no llegar ni siquiera a intentarse?
El miedo al fracaso hace que hoy en día muchas personas se resignen a vivir en vidas, en trabajos, en relaciones que no les gustan, simplemente por no atreverse a intentar lo que realmente quieren, solo por miedo a que les salga mal.
En este post vamos a desarrollar algunos puntos claves sobre este tema, para aprender a lidiar con este miedo.
Si quieres ver el contenido en vídeo, aquí te lo dejo:
Aquí puedes escucharlo en formato audio:
El éxito y el fracaso. Dos caras de la misma moneda.
Es imprescindible, para gestionar nuestras expectativas y por ende, nuestra felicidad, tener claro que significan para nosotros los conceptos de éxito y fracaso.
La definición de éxito y de fracaso es relativa, subjetiva y diferente para cada persona. Lo que son el éxito y el fracaso para ti dependerán enteramente de tus valores, de tu visión de la vida y de lo que tú quieras construir.
Por esto es importante examinar qué queremos y distinguir nuestras expectativas de lo que socialmente se reconoce como éxito o fracaso. Puede que lo que se considera socialmente exitoso, no tenga nada que ver con lo que a nosotros puede hacernos felices.
Entonces la pregunta que debes hacerte en primer lugar sería ¿Qué es el fracaso para mí?
¿Por qué te da miedo el fracaso? Las trampas del ego.
Otro punto importante es si te da miedo el fracaso por lo que significaría para ti mismo, o si lo que realmente te asusta es que los demás te perciban como “fracasado/a”.
Me encuentro con que muchos de mis clientes me dicen “quiero que me salga bien para cerrarle la boca a fulanito”. Esto, sin darnos cuenta, está poniendo nuestra validación fuera de nosotros. Y el algo muy peligroso.
Lo que piensen los demás de nosotros, de si nos va bien o mal o de si lo que hacemos y logramos es un éxito o un fracaso, dependerá de su escala de valores, y esta puede que no tenga absolutamente nada que ver con la nuestra.
Tú no tienes ningún poder para cambiar la opinión de los demás, por lo tanto si basas tu felicidad en cómo te ven otros es probable que nunca logres ser feliz.
Para alguien el éxito puede ser conducir un descapotable, mientras que para ti es construir una familia feliz, o vivir en la montaña y tener un huerto. ¡Crees que serás feliz si persigues su definición de éxito en vez de la tuya?
¿Cómo saber cuándo rendirse?
Algo imprescindible a la hora de vencer el miedo al fracaso es plantearse ¿Cuándo decidiré que he fracasado?
o, dicho de otra manera…
¿hasta cuándo estoy dispuesto a intentarlo?
Si nunca te has planteado esta pregunta, te recomiendo que la respondas con todo lujo de detalle ¿difícil, verdad? y es ahí donde vemos que el considerar que fracasamos en realidad depende de nosotros, al igual que seremos quienes decidamos cuándo rendirnos.
En el vídeo te cuento cuál es mi propia definición de fracaso y también cómo decido yo cuándo es momento de rendirme, pero te adelanto que hay muchas decisiones que tomar y también muchas formas de aprender y redirigir.
¿Cómo tomar decisiones?
Ten en cuenta que para ti el éxito puede consistir en probar mil cosas, en luchar por tus sueños, en experimentar y aun con riesgos vivir la vida que quieres.
La mejor forma de tomar decisiones acertadas es tener muy claros cuáles son tus valores y dejar que estos te guíen. Úsalos como hoja de ruta, se convertirán en el timón de tu vida y esta será mucho más feliz y coherente con quién eres y con quien quieres ser.
El miedo al cambio es una de las emociones más naturales para el ser humano.
El problema nunca es tener miedo, sino que el miedo nos impida llevar a cabo la vida que realmente deseamos.
No debemos esperar a que el miedo desaparezca, sino entender por qué está ahí, cuál es su función y cómo podemos convivir con la incertidumbre sin que esta nos paralice.
Hoy vamos a hablar de todo esto por aquí.
Si prefieres el formato vídeo aquí te lo dejo:
Si prefieres solo audio, aquí puedes escuchar el podcast:
¿Por qué tenemos miedo al cambio?
Nuestra mente está diseñada para mantenernos con vida. Es por esto que nos alerta frente a lo desconocido, para prevenirnos de un posible peligro.
Sin embargo, a día de hoy, nuestros cambios de vida rara vez atentan contra nuestra supervivencia, pero nuestra mente sigue actuando de la misma manera frente aquello que no podemos proveer. Por si acaso, no sea que haya un monstruo que nos coma si vamos a esa entrevista de trabajo o si montamos nuestro propio proyecto.
El caso es que lo que sentimos cuando nos enfrentamos a un cambio es sensación de indefensión, de falta de herramientas.
De repente no podemos prever los escenarios posibles a los que nos enfrentaremos. Y es por esto que hay personas que prefieren mantener una situación en la que sufren, ya que el miedo al cambio les produce aún más estrés.
¿Cómo vencer el miedo al cambio?
Ahora que entendemos por qué sucede esto es más fácil tratar de vencer ese miedo irracional que nos está impidiendo alcanzar algunos logros que son importantes para nosotros.
En primer lugar, es importante que interiorices el hecho de que lo desconocido no tiene por qué ser peor que lo que tienes. Tendemos a ponernos en los peores escenarios posibles, sin darnos cuenta de que es probable que estos escenarios nunca sucedan.
En segundo lugar, no necesitas convencerte de que en la nueva situación a la que te enfrentas no sucederán problemas ni situaciones inesperadas, porque lo más normal es que sí ocurran. Sin embargo, te invito a que examines tu capacidad resolutiva y confíes en ella.
¿No eres capaz de resolver los problemas que se plantean en la situación en la que estás ahora? ¿No lo has hecho en otras circunstancias difíciles de tu vida?
Pues esa capacidad de resolución no se esfumará de la noche a la mañana y te garantizo que es una de las mayores habilidades que podemos tener y seguir desarrollando para tener éxito en cualquier contexto.
¿Cómo vencer el miedo al cambio laboral?
Además de asimilar que lo desconocido no es sinónimo de algo malo, algo que te ayudará a que el miedo no te frene es saber que en cualquier momento puedes dar marcha atrás, o cambiar de opinión.
Recuerda que en todo momento eres dueña/o de tus decisiones, que tienes derecho a cambiar de opinión, de gustos, de prioridades en todo momento.
Esto ni siquiera significa que eso vaya a pasar, sin embargo, darnos cuenta de ello, aligera mucho el peso de tener que tomar decisiones en aspectos tan importantes como nuestra vida laboral.
Recuerda que hay pocas decisiones en la vida que sean inamovibles y desde luego el trabajo no es una de ellas.
Si quieres saber un poco más acerca de en qué fase está tu carrera profesional y cómo seguir avanzando, aquí te dejo mi Test de Diagnóstico Profesional (insertar enlace sobre las palabras “Test de diagnóstico profesional”, rellénalo y te enviaré tus respuestas personalizadas y algunos tips para seguir avanzando de acuerdo a tu situación concreta y objetivos.
¿Y si mi nuevo trabajo es peor?
¿Y si es mejor? Si no te das la oportunidad nunca lo descubrirás.
recuerda que para tener éxito en algo debes correr el riesgo de que no salga bien. Si no corres ese riesgo, nunca lograrás nada porque significará que no te estás dando la oportunidad de intentarlo.
Si algo no sale como esperabas, podrás tomar decisiones, pivotar, hacer cambios, adaptarte… Incluso volver al punto en el que estás ahora. De verdad vas a privarte de experimentar el ¿Y si es mil veces mejor?
Son muchas las personas que están cansadas o desmotivadas con sus trabajos por cuenta ajena, pero tienen dudas sobre si es buen momento para dejarlo, o sobre si emprender sería una buena opción para ellas.
Los mayores miedo suelen ser
“Y si lo dejo y después mi negocio no funciona”…, o
“Y si lo dejo y luego estoy peor que ahora”
Por eso hoy quiero resolver contigo esas dudas para que puedas tomar buenas decisiones con respecto a este proceso.
Para que puedas disfrutar del contenido con todo detalle, aquí tienes el vídeo:
Si prefieres escucharlo, te dejo el podcast aquí:
¿Cómo sé si es buena idea dejar mi trabajo y emprender?
Bien, déjame pone algo sobre la mesa desde el principio: Emprender no es para todo el mundo.
Es cierto que es genial ser tu propio jefe, decidir tus horarios, tus proyectos, elegir a tus clientes, pero… es que hay personas a las que no les gusta sentir la responsabilidad de estar en ese proceso contante de toma de decisiones, y punto.
Es totalmente respetable. Si quieres un trabajo en el que al terminar logres desconectar, que no te tenga noches en vela y con el que no sientas esa fuerte relación de compromiso sobre tus decisiones… No emprendas.
Sin embargo, si eres una persona con una gran motivación por lo que haces, a la que le gusta ponerlo todo de sí misma en su trabajo, o con una gran vocación, puede que tu emprendimiento se convierta en una de las mayores satisfacciones de tu vida.
Algo más a tener en cuanta es cuánto de capaz eres de tolerar la incertidumbre. Una empresa grande te puede garantizar algunas cosas (a menudo menos de las que nos creemos) pero cuando emprendes, cada día te la juegas. Hay meses mejores, otros peores, al final tienes que conseguir que la media te compense, pero no esperes una facturación recurrente mes a mes ¿Cómo vas a llevar esto?
¿Cómo dejar mi trabajo para emprender?
Cuando llegue el momento de dejar tu trabajo (en el siguiente apartado hablaremos de cómo saber que este momento ha llegado) te recomiendo que lo hagas de la mejor manera posible.
Es importante, en todas las etapas de nuestra carrera profesional, construir buenas relaciones y hacernos con una buena agenda de contactos. Nunca sabes si el que ahora es tu jefe, podría convertirse en tu cliente más adelante, o recomendarte a alguien.
Incluso cuando estamos en un puesto de trabajo que no nos satisface, siempre tenemos que hacer lo posible por desempeñar un buen trabajo y ser buenos profesionales.
Si tienes dudas sobre cómo seguir avanzando en tu carrera profesional, aquí te dejo este Test de Diagnóstico Profesionalque en tan solo dos minutos te dirá cómo continuar avanzando de acuerdo a tus preferencias.
¿Cuánto debo estar ganando con mi negocio para dejar mi trabajo por cuenta ajena?
Es difícil establecer una cifra exacta de facturación con la que puedas vivir 100% de tu negocio.
A priori, podríamos pensar que debemos estar ganando con nuestro emprendimiento lo mismo que ganamos por cuenta ajena para que merezca la pena dejarlo, pero esto sucede en muy contadas ocasiones.
Lo importante aquí, es que seas capaz de estimar cuánto cuesta mensualmente tu estilo de vida y cuánto necesitas para mantenerlo o si vas a hacer algunos ajustes.
Es importante que hagas una radiografía de tus finanzas, que tengas en cuenta con cuántos ahorros cuentas, cuáles son tus deudas a pagar, tus gastos mensuales, y si puedes hacer algún recorte.
Una vez sabes esto te recomiendo que tengas un colchón de ahorros por si las cosas vienen mal dadas. Puede que tu negocio empiece a arrancar, dejes tu trabajo y luego tengas seis meses reguleros. ¿Cómo afrontarías esta situación?
El colchón de emergencia no es algo que solo recomiende tener a las personas cuando empiezan, sino que creo que es algo que todo dueño de negocio debería tener para poder trabajar con menos estrés y resolver cualquier situación que pueda surgirte.
Yo por ejemplo siempre intento contar con el equivalente a seis meses de gastos (en los que incluyo mi sueldo) en la cuenta del banco de mi negocio.
Ahora por ejemplo, puedo cogerme la baja por maternidad mucho más tranquila 😉
El punto de inflexión para dejar tu trabajo.
Te recomiendo que aunque fijes unos requisitos que deben darse para que pases de trabajar por cuenta ajena a trabajar 100% en tu proyecto, seas flexible con estos requisitos.
En ocasiones pensamos cosas tales como “cuando facture X / cuando tenga X clientes, dejaré mi empleo/ contrataré ayuda”. Sin embargo son muchas las ocasiones que hasta que no damos ciertos pasos en los que tenemos una implicación mayor, los resultados no llegan.
Y eso por eso que te animo a que constantemente revises y tengas en cuenta, si no estás llegando a los resultados que necesitas, qué es aquello que te está impidiendo conseguirlo. Quizás necesites darle el 100% a tu proyecto, para poder lograr los resultados que quieres.
Es mucho más común de lo que parece que cuando ya llevamos años trabajando en una profesión, nuestros cambios personales, nuestras circunstancias y desarrollo personal, hagan que nos replanteemos si nuestro trabajo responde a nuestro verdadero propósito.
Saber cuál es mi propósito profesional a menudo se convierte en la obsesión de muchos. Y para empezar quiero decirte que no suele ser bueno convertir esta búsqueda en una cruzada.
Tu propósito en la vida es existir, no necesitas cumplir más misión que esa, vivir y ser feliz. Eres valiosa/o por ti mismo.
Sin embargo, puede que quieras sentirte realizado profesionalmente, y por eso quiero ayudarte con el contenido de esta semana.
Si quieres ver el vídeo aquí te lo dejo:
Como siempre también en formato podcast:
¿Qué implica la satisfacción laboral?
Las personas somos seres complejos. Sentirse satisfecho en la vida implica que todas nuestras esferas estén más o menos equilibradas, tanto la personal, como la profesional.
Pero si nos centramos en qué hacer para encontrar la satisfacción laboral, probablemente debamos tener en cuenta los siguientes factores:
Que nuestra ocupación no sea demasiado fácil, ni demasiado difícil.
Que el resultado de nuestro trabajo sea tangible de alguna manera, reconocible.
Que además de satisfacción personal estemos haciendo un aporte al mundo con nuestro trabajo.
Que podamos desarrollar nuestra ocupación en un ambiente laboral agradable.
Que podamos compatibilizar nuestro trabajo con el estilo de vida que deseamos.
Como ves son bastantes los factores que influyen, pero está bien que los tengamos en cuenta, porque si algo está fallando, mirar a esta lista nos servirá para identificar el problema y poder ponerle solución.
¿Cómo descubrir mi pasión o propósito?
Como hemos visto en el apartado anterior, esto no depende solamente de que hagamos lo que más nos gusta o lo que mejor se nos da. Si no de otros muchos factores.
Entre ellos, cómo aportamos a las personas para las que trabajamos. Es decir, ¿Qué problema puedes ayudar a solucionar?
Esta pieza es clave, ya que no solo será muy importante en cuánto de satisfecho te sientas con tu trabajo, sino en que otras personas estén dispuestas a contratarte.
Solo si tienes claro cómo puedes ayudar y ofreces esa ayuda a los demás a cambio de dinero, podrás profesionalizar tu vocación. De otra manera, acabaría siendo meramente un hobby.
Si necesitas ayuda sobre cómo elegir el nuevo trabajo al que te quieres dedicar. Te dejo un artículo sobre esto aquí. (Insertar enlace en la palabra “aquí”
¿Cómo saber cuáles son mis talentos y habilidades?
Evalúa cuáles son tus fortalezas y debilidades, pero ten cuidado porque a veces podemos pensar que no somos buenos en algo cuando en realidad no se nos da tan mal.
Por esto te recomiendo que revises qué creencias y etiquetas tienes acerca de lo que se te da mejor y peor. Pregunta a otras personas y déjate sorprender por sus respuestas.
Para descubrir qué quieres hacer en tu nueva etapa profesional te invito a que te hagas estas preguntas:
¿El trabajo en el que estás, te llenó en algún momento?
¿Qué hubieras querido hacer si hubieses elegido otra cosa?
¿Qué es importante para ti en tu trabajo?
¿Cómo crees que puedes ayudar a otros?
Ser feliz en el trabajo: posibilidad o utopía.
Antes de acabar quiero dejar algo claro. No todas las personas hacemos nuestra máxima contribución en la vida desde la esfera de lo profesional. Para algunos de nosotros es una pieza muy importante, en la que consideramos que brillamos con nuestro potencial más grande, pero para otros no es así, y si ese es tu caso también está bien.
Que tu trabajo te llene y te haga sentir satisfecho no significa que te defina ni que sea aquello que en tu vida saca lo mejor de ti. Puedes conseguir eso también de otras maneras.
Te dejo aquí el enlace directo a mi Test de Diagnóstico Profesional con el que en tan solo dos minutos te podré dar una respuesta personalizada sobre tu situación y cuáles son los siguientes pasos a dar dependiendo de tus objetivos: https://marinadeluna.com/test-diagnostico-profesional/
¿Crees que es tarde para cambiar de carrera profesional?
¿Temes que nadie te contrate si empiezas de cero en un nuevo sector?
¿No estás seguro de si tu economía, o la de tu familia, puedan permitirse este cambio?
Estas y otras muchas son las dudas que nos planteamos cuando aparecen las ganas de cambiar de profesión en mitad de nuestra vida laboral. Pueden ser, los 40, los 45, eso da igual.
Sabes que te quedan más de 20 años trabajando y realmente te apetece hacer este cambio. Y ¿sabes qué? ¡Tienes todo el derecho del mundo a cambiar de trabajo o de profesión, tengas la edad que tengas.
Solo necesitas planificarte un poco y tener en cuenta algunos consejos de los que te voy a hablar hoy.
Si quieres ver el vídeo en el que hablo de esto en detalle, te lo dejo aquí
Si lo tuyo es escuchar mientras haces otras cosas, aquí tienes el podcast 😉
¿Cuándo es el momento de cambiar de trabajo?
El momento ideal para cambiar de trabajo, no lo puede decidir nadie más que tú. El momento ideal es el ideal cuando lo es para ti.
Sin embargo, sí podemos tener en cuenta algunas cosas que hacen que tomemos la decisión de cambiar de profesión de forma meditada, pero sobre todo estratégica, para obtener mejores resultados.
3. ¿Qué necesitas para hacer ese cambio? (formación, dinero, un mentor).
4. Crea un plan de transición.
Es importante que nos demos cuenta, de que a menudo las cosas no tienen por qué suceder de hoy para mañana. Sin embargo, si queremos un cambio significativo en alguna esfera de nuestra vida, lo importante es empezar a planificar ese cambio para que lo necesario vaya sucediendo.
¿Cómo afecta mi experiencia previa a mi cambio de profesión?
Mucha gente tiene pánico y se pregunta “¿Cómo puedo empezar de cero en un nuevo sector profesional?” Y bueno, he de decirte que nunca empezamos de cero, porque nuestra experiencia anterior va con nosotros a todos los sitios. Pero sí tienes que aprender a venderte como un profesional de alto valor.
Piensa en qué has aprendido hasta ahora en todas tus experiencias anteriores, no solo las profesionales, también en las personales, y configura un perfil profesional que ofrezca toda tu experiencia anterior como un gran valor diferencial frente a otros posibles candidatos.
Algo importante, tal y como te explico en el vídeo es, ver con qué cuentas y esto incluye qué contactos tienes, a quién conoces que puede ayudarte o contratarte en tu nueva andadura profesional.
A menudo asesoro a personas que están haciendo este cambio profesional y que quieren pasar de ser empleados a ser freelance. Piensa si la empresa en la que trabajas no podría estar interesada en tus nuevos servicios, o en contratarte como un colaborador externo.
¿Cómo hacer que me contraten?
¿Por qué te tienen que elegir a ti? Esta pregunta nos da miedo, pero lo mejor que podemos hacer es trabajar en su respuesta.
No pienses solo en ti y en qué puedes hacer. Piensa también qué otras opciones tendrán tus futuros clientes o empleadores, y trata de destacar aquello que te hace diferente ¿sabes cuál es tu valor diferencial frente a otros candidatos?
Si tu miedo es que el resto de los candidatos sean más jóvenes que tú, o tengan más experiencia en ese sector… ¿Puedes hacer que tu experiencia anterior en otro valor sea valiosa para la persona que te va a contratar? ¿Tienes alguna habilidad especial que ellos no tienen?
Es importante que nos demos cuenta de que las personas no contratan al mejor profesional, sino al que mejor se vende. Si no te vendes bien, corres el riesgo de que contraten a alguien que no es mejor que tú, pero se vende mejor.
La planificación económica en la reinvención.
Como decíamos antes, ningún cambio tiene que ser de un día para otro. Es importante ser conscientes de qué necesitamos para hacer ese cambio y darle a la transición el tiempo necesario para que nuestra economía no sufra y nos acabemos viendo inmersos en un período de mucho estrés.
Ten en cuenta cómo funciona tu economía y la de tu familia:
Cuánto dinero requiere vuestro estilo de vida al mes.
¿Tenéis ahorros?
¿Tenéis deudas?
¿Cuánto tiempo podríais sobrevivir sin que tú aportases a la economía familiar?
¿Cuánto tiempo crees que necesitas para hacer tu transición?
Piensa que no hace falta que dejes tu trabajo de inmediato. Casi todas las personas que comienzan un cambio profesional lo hacen mientras trabajan, dedicándole sus ratos libres y poniéndole mucho compromiso.
También tienes la opción de, cuando ya estés más seguro, pasar a un trabajo de media jornada y estar un tiempo así hasta que veas que es factible hacer la transición total.
Te dejo aquí el enlace directo a mi Test de Diagnóstico Profesional, con el que en tan solo dos minutos te podré dar una respuesta personalizada sobre tu situación y cuáles son los siguientes pasos a dar dependiendo de tus objetivos: https://marinadeluna.com/test-diagnostico-profesional/
Tanto las personas que están tratando de elegir su carrera profesional por primera vez, como aquellas que tras varios años quieren reinventarse, a menudo se ven en la encrucijada de tener que elegir entre dos trabajos o decidir entre dos profesiones.
Somos muchas las personas multiapasionadas, que nos sentimos atraídas por distintos sectores y nos preguntamos cuál será mejor para nosotros, siendo en ocasiones muy difícil decidir.
Tener que decidir entre dos trabajos es una tarea que debes tomarte con calma, pues las consecuencias pueden tener un gran impacto en tu vida. Sin embargo, recuerda que a menudo hay que probar e ir haciendo reajustes hasta que por fin te acabas sintiendo satisfecho con lo que haces.
En este vídeo te explico TODO lo que necesitas saber para tomar esta decisión:
Si prefieres el formato audio, aquí mismo puedes escucharlo en PODCAST:
Haz ahora mi Test de Diagnóstico Profesional, que en tan solo dos minutos te dará respuestas personalizadas sobre en qué punto está tu carrera profesional y qué puedes hacer para seguir avanzando.
¿Qué se debe tener en cuenta para cambiar de trabajo?
Si te estás planteando cambiar de trabajo, debes tener en cuenta varias cosas:
Qué opción de las que barajas es la que más se adapta a ti.
Cuál de las opciones que te planteas tiene mayor posibilidad de éxito según el sector y las tendencias del mercado.
Verás que en esto de elegir empleo, hay personas que se decantan por decir que lo más importante es que hagas lo que te guste sin importar las salidas que tenga, sin embargo otras, en el otro extremo, solo miran por el salario que vayas a obtener o la rentabilidad del negocio.
Yo opino que ambas partes son importantes a partes iguales.
No vas a dejar tu trabajo que no te gusta, para meterte en otro sitio que no te aporta ninguna satisfacción.
En los siguientes apartados voy a explicarte como analizar la VIABILIDAD de un proyecto, tanto la viabilidad interna, como la externa.
¿Cómo saber si un trabajo es para mí?
Tenemos que hacernos varias preguntas y evaluar bien las respuestas para saber si ese trabajo es lo que buscamos o necesitamos.
Para estudiar la viabilidad de una profesión a nivel personal o interno, pregúntate:
¿Me gusta?
¿Se me da bien?
¿Quiero hacerlo como un trabajo?
Estas preguntas, no siempre tienen la misma respuesta. A menudo, trabajo con gente en su reinvención profesional que tras años desempeñando un puesto de trabajo que se les da realmente bien, han acabado hartos y no quieren hacerlo más.
No por el hecho de que algo se te dé bien tienes que querer hacerlo. Al igual que no porque algo te guste como hobby tienes que querer convertirlo en tu trabajo.
Por otro lado, te recomiendo que también te preguntes:
¿Qué otras habilidades requiere este trabajo?
¿Cómo será el día a día?
¿Qué estilo de vida me dará?
A la hora de decidir ten en cuenta que quizás necesites habilidades extra, porque en el día a día de esa profesión, no simplemente te baste con la parte más técnica del trabajo.
Esto se acentúa especialmente si queremos emprender, ya que llevar nuestro propio negocio suele requerir de nosotros que desarrollemos un perfil mucho más completo: organización, liderazgo, dotes de comunicación, habilidad para las ventas… son algunos de los extras que debemos plantearnos que nos podría requerir nuestro proyecto.
Y por supuesto, tener presente que estilo de vida queremos, para saber si los horarios, las vacaciones, la flexibilidad que tengamos con ese trabajo nos permitirá llevar la vida que queremos construir.
Haz ahora mi Test de Diagnóstico Profesional, que en tan solo dos minutos te dará respuestas personalizadas sobre en qué punto está tu carrera profesional y qué puedes hacer para seguir avanzando.
¿Cómo saber si una profesión tiene futuro?
Para saber si tu profesión tendrá demanda tienes que tener muy claro que problema solucionas. Aquel que nos vaya a contratar, ya sea como autónomo o dentro de una empresa lo hará porque somos capaces de solucionar uno o varios problemas que para ellos son importantes.
Plantéate:
¿Qué problema soluciono desde esa profesión?
¿Las personas con este problema están dispuestas a pagar a un profesional que les ayude con esto?
Esto te dará bastantes pistas, pero aun así, tu respuesta a las preguntas anteriores puede estar muy sesgada o ser subjetiva, por lo que es importante que analicemos el sector y hablemos con personas que o bien ya se dediquen a ello, o sean consumidores de ese producto o servicio, o consideremos que podrían ser clientes potenciales.
Por último, debes considerar si quieres emprender o quieres trabajar en una empresa, ya que dependiendo del estilo de vida que quieras llevar y cuáles sean tus metas profesionales, la respuesta podría variar bastante.
¿Cómo elegir entre varias opciones profesionales?
Después de tener en cuenta todo lo anterior, hay algo más que quiero decirte.
A menudo nos sucede, que entre dos opciones tenemos una que nos gusta más, pero la otra nos parece más alcanzable a corto plazo, o más realista.
Si elegimos la segunda, estamos corriendo el riesgo de equivocarnos, solo por tomar el camino más fácil. Pero claro, si elegimos la otra ¿lo conseguiremos?
Para mí, la clave está en darnos cuenta de que nuestra vida laboral es muy larga y que no tenemos por qué pretender conseguir el objetivo final durante el primer año.
Si el proyecto que más te gusta es el más ambicioso, plantéate cuál sería el primer escalón que podrías subir, para estar más cerca de tu meta y lograr esto de aquí a un plazo de 5-6 años.
Es mejor construir pasito a pasito hacia lo que quieres que descartar la idea porque es demasiado grande como para llevarla a cabo. Te aseguro que cuando lleves un año construyendo las bases para alcanzar ese gran sueño, el camino recorrido te hará alegrarte de haber tomado esa opción.
Haz ahora mi Test de Diagnóstico Profesional, que en tan solo dos minutos te dará respuestas personalizadas sobre en qué punto está tu carrera profesional y qué puedes hacer para seguir avanzando.
Utilizamos cookies para optimizar nuestro sitio web y nuestro servicio.
Funcional
Siempre activo
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario para el propósito legítimo de permitir el uso de un servicio específico explícitamente solicitado por el abonado o usuario, o con el único propósito de llevar a cabo la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
Preferencias
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para la finalidad legítima de almacenar preferencias no solicitadas por el abonado o usuario.
Estadísticas
El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos.El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos anónimos. Sin una requerimiento, el cumplimiento voluntario por parte de su proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito no se puede utilizar para identificarlo.
Marketing
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad, o para rastrear al usuario en un sitio web o en varios sitios web con fines de marketing similares.